Se muestra una experiencia de implementación del aula invertida como estrategia innovadora para el aprendizaje en la asignatura de Diversidad Cultural y Desigualdades Sociales en Salud en el alumnado de Primero del Grado en Enfermería de la Facultad de Fisioterapia y Enfermería de Toledo de la Universidad de Castilla-La Mancha en una de las asignatura básicas del segundo semestre, Diversidad Cultural y Desigualdades Sociales en salud y parte de la necesidad de contar con estrategias innovadoras que brinden experiencias significativas para favorecer el aprendizaje y una actitud favorable hacia la asignatura. El programa de esta asignatura se articula en tres Módulos a lo largo del segundo semestre del curso académico: determinantes sociales de la salud, cultura y salud y género y salud. Esta metodología facilita un aprendizaje centrado en el alumnado, permitiéndole asumir un rol protagónico en su proceso de aprendizaje. Este método, permite la incorporación de nuevas tecnologías y utiliza una dinámica en la que estudiantes y docentes emplean diferentes herramientas (videos, aplicaciones…) que permiten llevar a cabo procesos más personalizados a través de actividades que se realizan en casa de manera autónoma, permitiendo a las y los docentes optimizar el tiempo en las sesiones presenciales resolviendo dudas a través de actividades teórico-prácticas diseñadas ad hoc.

El Espacio Europeo de Educación Superior ha favorecido metodologías docentes universitarias que fomentan la participación del alumnado dentro del aula. Pero no hay que olvidar que la enseñanza realizada en clase magistral ha sido una de las técnicas más importantes a lo largo del tiempo, donde el conocimiento principal es gestionado por los docentes. Dicha situación ha facilitado la construcción de nuevo conocimiento en el alumnado que, a lo largo del tiempo se ha ido potenciando dentro del aula. En este sentido cabe destacar que, el profesorado que recurre a una docencia más expositiva, sin dejar de lado la clase magistral, se encuentra impartiendo sus materias curriculares a lo largo del periodo académico establecido. Llegado el caso del alumnado de primero, encontramos discentes los cuales se hallan en un periodo de adaptación y acomodación a una nueva situación, entorno y plan formativo, con escasas iniciativas tanto a la participación como a la realización de alguna pregunta ante cualquier duda surgida dentro del aula. La transición a estudios superiores se considera un cambio muy potente dentro del estudiantado el cual será muy marcado dentro del año anterior al inicio de estos estudios como durante el primer año formativo de los mismos.

Es importante y fundamental poder poner en práctica casos clínicos en las clases teóricas a todos los alumnos de la rama de Ciencias de la Salud, en este caso a los alumnos de Enfermería, que con estas prácticas tanto en el aula como en los laboratorios antes de comenzar su rotatorio por diversos centros sanitarios, mejora y facilita su comprensión y al mismo tiempo adquieren una mayor destreza en las competencias generales y específicas reflejadas en la Guías de cada asignatura. Aparte de esto, se pretende que el alumno comience a tomar decisiones y a poner en práctica su juicio clínico ante un supuesto caso y ver el escenario de trabajo al que se enfrentará en sus futuras prácticas. Es importante destacar que previamente se explica en clase toda la teoría o se realiza el método de enseñanza, y posteriormente tras haber adquirido el alumnado los conocimientos previos, se realizan los seminarios de estos casos clínicos poniendo en práctica los conocimientos adquiridos en las clases teóricas. En consecuencia, a esto el alumnado consigue tener una percepción más real y comienza a adquirir una cierta confianza previa al periodo de prácticas en el centro sanitario asignado para realizar sus prácticas clínicas.

Este tema acerca de la separación o unión entre la teoría y práctica enfermera es uno de los debates más frecuentes acerca de determinadas disciplinas aplicadas como es la Enfermería. De manera concreta, cuando nos referimos a teoría hacemos referencia al mundo académico y al conocimiento recogido de forma evidente. Por otra parte, cuando nos referimos a la práctica, esta ha sido utilizada para referirse a cuestiones técnicas del cuidado enfermero propiamente dicho, así como también al conocimiento que se ha forjado con la experiencia profesional, desde el cuidado asistencial principalmente. En general, hay que subrayar que la teoría y la práctica son estudiadas de manera paralela. Pero no hay que olvidar que se trata de dos componentes de una relación compleja, pero a la vez interactiva. En la disciplina enfermera se han señalado distintos tipos de enfoques relacionales entre la teoría y la práctica: Enfoque científico: sigue la racionalidad del método científico. Enfoque pragmático: no refleja el uso de la teoría, se rige por los valores éticos de la profesión, utilizados por enfermería para seguir las buenas prácticas. Enfoque del sentido común: describe la práctica como generador y evaluador de la teoría. Los resultados que se han obtenido han puesto de relieve una marcada “grieta” entre teoría y práctica, justificada por diferentes factores y relacionándolo con unos peores resultados en salud.