Esta investigación analiza la aplicación de la metodología Flipped Learning como estrategia didáctica inclusiva para favorecer la integración de estudiantes con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) en contextos de enseñanza técnica superior. El estudio parte de la creciente presencia de perfiles con necesidades específicas de apoyo educativo en etapas postobligatorias y de la necesidad de incorporar metodologías activas que respondan a la diversidad cognitiva y social del alumnado. A través de un diseño de investigación-acción educativa, se implementó una propuesta metodológica basada en el aprendizaje invertido y el Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP) en un grupo de enseñanza superior del ámbito audiovisual. La intervención se estructuró en fases de trabajo cooperativo, utilizando las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) como elemento integrador y de motivación. Los resultados evidencian una mejora en la implicación del alumnado, la autorregulación del aprendizaje y las relaciones interpersonales dentro del aula, especialmente entre los perfiles con TDAH. Asimismo, se observa una mayor autonomía y una reducción de las conductas disruptivas gracias a la organización flexible y la responsabilidad compartida que promueve el modelo Flipped Learning. La investigación concluye destacando el potencial de las metodologías activas y tecnológicas como herramientas de inclusión y éxito académico en la educación superior, así como la necesidad de seguir formando al profesorado en estrategias pedagógicas adaptativas e innovadoras.

La ponencia sostiene que la universidad, fiel a su vocación, no debe limitarse a certificar competencias ni a prepararse para un mercado volátil, sino a habilitar formas de vida y “hacer mundo en común”. Desde esta perspectiva, el arte no es adorno curricular, sino método de conocimiento y práctica de libertad que produce realidad al organizar materiales, cuerpos y contextos. Se propone concebir la docencia como hospitalidad epistemológica y laboratorio de invención democrática, donde teoría y práctica dialogan mediante el ensayo como prueba y escritura compartida. Se plantean tres desplazamientos: 1.) del contenido al problema (intervenir críticamente en asuntos como accesibilidad, memoria, ambiente y desigualdad); 2.) del individuo al colectivo (inteligencia compartida en la diferencia); 3.) del examen-veredicto al portafolio-proceso (evaluación como conversación con evidencias e iteraciones). Sobre esta base, se articulan cuatro líneas operativas: 1.) laboratorios de co-creación con comunidades y colectivos excluidos, en ciclos de 8–10 semanas y con formatos participativos; 2.) evaluación performativa y por portafolio con rúbricas éticas, técnicas y sociales, y accesibilidad multimodal; 3.) currículos en espiral basados en problemas con eje estético, indicadores de impacto y datos anuales; 4.) gobernanza inclusiva del aula con roles rotativos, acuerdos de convivencia y presupuestos estudiantiles. Para sostenerlo, se requieren tres palancas institucionales: micro financiación ágil, alianzas con ética de coautoría y una carrera académica que reconozca innovación y transferencia social. Éticamente, el arte propone una relación no extractiva: no “dar voz”, sino tejer dispositivos de coautoría. Se ofrece una plantilla replicable en seis pasos y criterios de éxito medibles. La tesis final: si la universidad es laboratorio de lo común, el arte es su método más potente de invención democrática, capaz de conjugar rigor, justicia y alegría.

La ponencia presenta una experiencia docente orientada a cuestionar la figura hegemónica del figurín en la enseñanza del dibujo de moda. Partimos del diagnóstico ampliamente señalado por enfoques críticos y feministas: la práctica académica suele perpetuar un modelo corporal único —femenino, delgado y normativo— que reduce el espectro de posibilidades y limita la creatividad, dificultando además una mirada ética sobre la representación. Como respuesta, en la asignatura Dibujo I (primer curso del Grado en Diseño y Creación de Moda) se implementó “Dibujando la Diversidad”, un proyecto que propone ampliar el repertorio visual del alumnado mediante la investigación y la representación de múltiples tipologías humanas (edad, género, complexión, etnia y capacidades), articuladas en catálogos de figurines diversos. Objetivos principales: * Desarrollar la observación anatómica aplicada a distintos cuerpos. * Interrogar críticamente los cánones del figurín tradicional. * Analizar la función de la imagen en la producción de estereotipos. * Promover la responsabilidad social del diseño en la construcción de imaginarios inclusivos. La metodología se alinea con el enfoque learning by design: el aula se entiende como laboratorio donde el conocimiento se construye a través de la práctica. En equipos reducidos, los estudiantes seleccionan referencias, estudian proporciones y realizan propuestas gráficas; cada participante cierra con una reflexión individual sobre proceso y aprendizaje. Los resultados evidencian la pertinencia del enfoque para integrar técnica, pensamiento crítico y compromiso social. Trabajar la diversidad corporal amplía el imaginario del estudiantado, fomenta el aprendizaje situado y favorece dinámicas colaborativas. Entre los logros destacan la mejora en la observación, el enriquecimiento del archivo visual personal y una perspectiva más empática y crítica sobre los cuerpos y su representación. Se propone dar continuidad al proyecto y su adaptación a otros contextos formativos vinculados al diseño y a la cultura visual.

El presente proyecto presenta el desarrollo e implementación de ColorStory APP, una herramienta digital basada en psicología del color diseñada para mejorar la coherencia narrativa y la alfabetización visual del alumnado en titulaciones de animación. La aplicación analiza las paletas cromáticas de ilustraciones o fotogramas, identifica los cinco colores predominantes mediante un algoritmo K-Means++ y los vincula a emociones específicas fundamentadas en la literatura científica (Heller, 2010; Elliot & Maier, 2014). El estudio, desarrollado con un enfoque mixto, combinó análisis cuantitativos y cualitativos con una muestra de 54 estudiantes del Grado en Animación y del Doble Grado en Animación y Videojuegos de la Universidad Europea de Madrid. La investigación se estructuró en cuatro fases: revisión bibliográfica, desarrollo beta de la APP, implementación en el aula y evaluación mediante cuestionarios, entrevistas y análisis comparativos de color scripts. Los resultados evidencian una alta usabilidad (88 % valoró la herramienta con la máxima puntuación) y un impacto directo en la narrativa visual: el 73 % del alumnado reajustó su paleta cromática y la dispersión de color se redujo en promedio un 22 %. Estos datos confirman que ColorStory APP no solo actúa como un recurso técnico, sino también como un instrumento pedagógico que fomenta la reflexión crítica y la autonomía en la toma de decisiones cromáticas. El proyecto se proyecta hacia su transferencia profesional, con potencial de integración en software de animación y sistemas de inteligencia artificial generativa, consolidándose como un puente entre teoría y práctica en la enseñanza de la narrativa visual.

En la formación en diseño de moda, el figurín académico ha actuado como matriz visual hegemónica: cuerpos alargados, extremadamente delgados, jóvenes y sexualizados. Esta convención, presentada como “neutral”, invisibiliza otras morfologías y experiencias corporales. La incorporación de herramientas de inteligencia artificial generativa, entrenadas con repositorios de imágenes sesgados, tiende a reproducir y amplificar esos cánones. Ante este escenario, la docencia debe capacitar a futuros diseñadores para identificar, interrogar y transformar dichos marcos de representación hacia enfoques más inclusivos y éticos. El estudio persigue: (1) cartografiar percepciones y resistencias del estudiantado ante figurines no normativos; (2) observar cómo emergen estas resistencias durante una actividad didáctica mediada por IA generativa; y (3) proponer un andamiaje de alfabetización visual crítica que desborde los límites del figurín convencional. Metodológicamente, se implementa una encuesta mixta (preguntas cerradas y abiertas) en grupos de Dibujo de Moda, que explora imaginarios sobre el figurín tradicional, actitudes hacia la diversidad corporal y expectativas de uso de IA en el aula. El análisis combina recuento cuantitativo y codificación cualitativa de argumentos, organizando las respuestas en cinco categorías: rechazo explícito; resistencias implícitas (dificultades técnicas/estéticas/comunicativas); neutralidad; aceptación condicionada; y aceptación plena. Se contempla, además, el cruce con variables como curso o experiencia previa con IA. Aunque en curso, la investigación apunta a que la IA puede operar como detonante pedagógico para evidenciar sesgos corporales y generar discusión crítica. Identificar las tipologías de resistencia permitirá comprender barreras cognitivas y afectivas que frenan la adopción de figurines diversos. En consecuencia, se defiende un currículo inclusivo que sitúe la diversidad corporal como eje de alfabetización visual y deontología profesional, promoviendo un uso de la IA consciente, sostenible y responsable.